jueves, 5 de febrero de 2009

El centavo tiene dos caras y la crisis muchas más.



Irene me acusa de dramático, de transformar algo simple en una compleja maraña . Yo le digo que esa acusación es incorrecta, que yo también soy un simplista incurable.
La semana pasada platicábamos de lo mas placidos en un café de esta ciudad donde ahora vivo, desmenuzábamos la mentada crisis ( LA CRISIS), los planes para detener el tsunami, que desbarata cualquier economía , en fin platicábamos de los efectos del mal, de la medicina y de la prevención.
Ella me contaba que esperaba que con Obama todo mejoraría y ella misma no le temía a la situación
( su lemita ese de “this is a great country and we stand to anything”), BS le respondí, recuerdo bien.
Yo por mi parte soy un poco mas "level headed"-
(realista sin tanta paja) y le asegure que todo se seguiría complicando y el nivel de fiebre pesimista acabaría por envolvernos (freirnos) a todos. La desesperación provocaría un aumento en la delincuencia y la violencia, si no son la misma cosa y que el efectivo permanecería guardado en los colchones de los afectados. Nadie quiere gastar, nadie quiere arriesgar y nadie se atreve a portarse temerario con el riesgo del mañana.
Las cosas no se ven bien, en los últimos meses (2 ó 3) muchos amigos y amigas míos han sido mandados a descansar, algunos solo trabajan cuatro o tres días a la semana y otros muchos simplemente fueron despedidos sin llegar a ninguna negociación. Los servicios del seguro social están abarrotados solicitando “wellfare” o el famoso “unemployment fund” que se convierte en una mísera cantidad cuando los servicios, artículos y demás cosas encarecen en un abrir y cerrar de ojos.
Los supermercados están cada vez mas vacíos, las ofertas en los periódicos indican especiales en electrodomésticos y otros artículos que en otros tiempos serian increíbles. Todo es como una bola de nieve que se va adhiriendo y va creciendo conforme el tiempo avanza.
Ayer Irene me llama y me cuenta su dura caída a la realidad, perdió su empleo y la plaza fue recortada por falta de presupuesto(los famosos recortes). Me pregunta si se de algún empleo, algo para poder vivir y con dolor en el alma le doy un poco de moral(yo sabiendo que no hay mucho de donde tomar), “no te preocupes ya pronto encontraras algo por allí, paciencia” le digo. Ella también tendrá que visitar la oficina del Seguro Social y rezar para que se pueda beneficiar de esta ayuda que en poco tiempo se quedara con fondos muy limitados.
El desempleo es otra bruja mas de esta hoyo llamado crisis. Mientras tanto yo también me aflijo por esta situación pero la percibo con otros ojos, con los ojos del guatemalteco que se a enfrentado a mil crisis en su eterna primavera.
Porque no es lo mismo la crisis gringa donde dejar de comer “roast beef” por “spam” es una atrocidad a nuestra crisis siempre perenne y de constante progresión. No cabe duda que la moneda tiene diferentes valores, para el rico un centavo no es nada y para el pobre un centavo ya es algo.

Cristian Mejía en el siglo del terror:
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4 comentarios:

Nancy dijo...

¿En donde vives, Cristian? Ya decía yo que no es en Guatemala.
Coincido contigo, aquí siempre hemos estado en crisis.

Patricia Cortez dijo...

bien christian, un campesino me decía "que comer, siempre se encuentra", igual, las crisis pasarán, aunque es dificil mantener alta la moral.

Anónimo dijo...

Nancy: vivo en la extensión mas grande de latinoamerica en E.E.U.U.= LA la vida me ha traido intermitentemente de Guate a este nuevo motel. Saludos y claro hemos vivido mil y una crisis.

Patricia Cortez( nuestra doctora en linea):asi me dijo alguien por alli, comer es lo que importa lo demas te lo espantas y claro moral alta, animo. Saludos.

el Kontra dijo...

Y yo también ando buscando hueso, que ya me quedé sin uno :( menos mal por el blog, si tan solo pagará.

Pero al mal teimpo buena cara.

Saludos men.